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'El Bomba' Cáceres y Pallarés, al retirarse del campo el delantero valenciano.
Un técnico a once mil kilómetros

Un técnico a once mil kilómetros

Simón Ruiz explicó que Ribas estuvo en contacto con él y con 'El Bomba' Cáceres desde Uruguay durante todo el partido

LA VERDAD

Domingo, 14 de septiembre 2014, 23:01

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El esperpento en el que se ha convertido todo lo que rodea al Fútbol Club Cartagena en este pésimo inicio de temporada escribió ayer un nuevo capítulo, uno que pasará a la historia de las muchas desdichas del balompié local. El cartagenero Simón Ruiz, delegado del equipo y portavoz del cuerpo técnico, confesó en la sala de prensa que el mánager general, Julio César Ribas, fue el que dio las instrucciones y ordenó los cambios durante el partido de ayer en el Artés Carrasco.

Evidentemente, el uruguayo es el entrenador y es el que manda. Hasta ahí, todo normal. Debe decidir. Lo surrealista es que Ribas estaba ayer a once mil kilómetros de Lorca, concretamente en Montevideo, donde hoy intentará agilizar todos los trámites en el Consulado español para conseguir cuanto antes un visado de residente temporal (válido hasta cinco años) para regularizar su situación en España. Ese sería el primer paso para que pudiera sentarse en el banquillo albinegro.

El caso es que es muy sorprendente que Ribas, sin ver el partido y solo escuchando desde Montevideo lo que le contaban por teléfono desde Lorca, fuese ayer el que diera las instrucciones (hablaron con él desde el vestuario en el descanso) y decidiera qué jugadores tenían que salir del campo para que entraran Seba Ribas y Gato. Pallarés, más tarde, se fue lesionado.

Precisamente el ariete valenciano fue uno de los que más crítico se mostró con el juego del equipo en la zona mixta. «A raíz del primer gol suyo, hemos ido arrastrando esa desventaja y no hemos sabido reponernos. Yo he sentido mucha impotencia, porque jugábamos con las líneas muy separadas y nos costó mucho llegar arriba. Al final, incluso me he lesionado y todo ha salido al revés», se quejó Pallarés en declaraciones a la emisora 'Gaceta FM'.

«Nos precipitamos»

En el campo, al técnico que más se le vio moverse fue a Domingo 'El Bomba' Cáceres, el uruguayo que ha sido el segundo de Ribas durante gran parte de su carrera. Sin embargo, una vez más, Simón Ruiz fue el que tuvo que volver a dar la cara delante de los periodistas. Es precisamente uno de los que menos opina dentro de un cuerpo técnico en el que también están Miguel Cuesta y Yepes. Por encima de ellos, en los despachos, están Florentino Manzano, Daniel Golpe y Javier Marco.

«Esta derrota no entraba en nuestros planes, desde luego. La competición te exige sumar y nosotros llegábamos a Lorca con la ilusión de hacerlo. Empezamos bien el partido, demostrando lo que estamos trabajando y dando el paso que llevamos tiempo queriendo dar. Hemos empezado a ver la evolución en nuestro juego que estamos buscando, pero ese tanto suyo nos ha hecho daño», explicó Simón Ruiz.

No quiso ahondar en los fallos defensivos que propiciaron los dos goles lorquinos. «Todo eso queda dentro. Lo tratamos en el vestuario y lo valoramos todo en un análisis interno. El problema es que en el segundo tiempo hemos jugado con más corazón que cabeza. El campo estaba mal y tampoco nos ha ayudado. Nos hemos precipitado y nos ha faltado más remate a puerta», dijo.

Por su parte, el lateral Juan Carlos Ceballos, también en 'Gaceta FM', restó gravedad a la primera derrota en Liga de la temporada. «Encajamos dos goles de auténtica mala suerte, pero no le dimos la espalda al partido pese al 2-0. La afición tiene que seguir apoyándonos, porque queda mucho y este equipo está preparado para hacer cosas importantes. Todos juntos vamos a sacar esto adelante». Sobre su posición ayer, de central, el defensa catalán señaló que «no es mi sitio, pero he hecho lo que he podido para ayudar al equipo».

Por último, Chus Hevia, que ayer solo jugó 15 minutos, declaró en la cita emisora que, pese a que apenas entra en los planes de Ribas, no va a tirar la toalla. «Llevo toda la vida peleando para tener una oportunidad como la del Cartagena. No me voy a rendir a la primera», indicó.

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