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Un operario cava una zanja en una banda del campo de fútbol del colegio Salesianos, ayer por la tarde.
El césped llega a Los Dolores

El césped llega a Los Dolores

Empiezan las obras para colocar hierba artificial en el campo de fútbol del colegio Salesianos

FRANCISCO J. MOYA

Jueves, 10 de julio 2014, 22:48

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El fútbol de Los Dolores, el barrio más poblado del municipio de Cartagena, por fin tiene algo que celebrar. Y es que en el Club Deportivo Dolorense, uno de los históricos del fútbol base local, empiezan a ver la luz al final del túnel, después de que ayer se iniciaran en el campo de tierra del colegio Salesianos las obras para instalar césped artificial de última generación en el recinto deportivo del colegio. El proyecto que el Ayuntamiento manejaba desde hace años (se habló de él por vez primera en 2008) por fin se ha puesto en marcha y el color marrón de la tierra dejará paso al verde de la hierba durante este verano.

En el club aseguran que las obras estarán terminadas en el mes de septiembre y se congratulan de que, de esta manera, acabarán todos los endémicos problemas de un campo que se encharcaba y quedaba impracticable cada vez que llovía un poco. Además, el campo de tierra de Salesianos se había quedado muy pequeño para dar servicio a un barrio tan grande como el de Los Dolores. Los trabajos costarán unos 170.000 euros. La Concejalía de Deportes pondrá 120.000 euros y la Federación de Fútbol de la Región de Murcia (FFRM) aportará los otros 50.000 euros, aunque su pago tendrá lugar en el año 2016.

«Estamos contentos, desde luego. Hasta que no vea el campo terminado no me lo voy a creer, pero el hecho de ver las máquinas trabajando aquí es una señal estupenda», comentaba ayer a este periódico José Rico, presidente del CD Dlorense. «Vamos a hacer lo básico, lo justo para remodelar el campo. Vamos a mantener los diez aspersores de riego que tenemos alrededor del campo, para que el presupuesto no se nos dispare. Pero dejamos preparado el sitio para poner cañones de riego más adelante. Se va a solucionar el tema de la recogida de aguas, con una nueva tubería de 90 centímetros que va a ir por todo el anillo del campo, y no vamos a poner asfalto debajo», explicó Rico.

Fibra de coco o caucho

La empresa que va a instalar el césped en el campo de fútbol de Salesianos es Italgreen, una de las más importantes del sector. «Queremos poner fibra de coco en vez de caucho. Es más ecológico y sería el primer campo de la Región de Murcia con fibra de coco. Lo que pasa es que cuesta 25.000 euros más que el caucho y es algo que todavía debemos decidir entre todos. El problema del caucho es que en verano, con el calor, hay olor a goma quemada. Les pasa a los compañeros de la Gómez Meseguer y de la Urbanización Mediterráneo», indicó Rico.

Para el CD Dolorense, que en los últimos años ha perdido su juvenil de División de Honor por culpa de sus precarias instalaciones -se lo cedió al Cartagena FC del polígono Cabezo Beaza- y ha visto cómo sus mejores jugadores se han fugado a equipos cercanos con campos de hierba, se abre ahora una nueva etapa. «Al cadete lo hemos subido este año a Primera. Y tenemos también un juvenil en Segunda, además del alevín y el infantil federado. Lo hemos perdido todo en estos últimos años. Y ahora, para recuperarlo, tenemos que ir poco a poco».

El Cartagena Féminas, recién ascendido a Segunda, también seguirá entrenando y jugando en Salesianos. Y además de los cuatro equipos federados masculinos, el CD Dolorense mantendrá sus doce conjuntos en la Liga Local de Cartagena. «Lo mejor de todo es quitarnos la pejiguera de los aplazamientos de partidos por la lluvia y darle al barrio y al colegio unas instalaciones dignas», confesó Rico.

Sin novedad en la 'Urba'

Por su parte, en la Urbanización Mediterráneo, donde disfrutan desde hace dos años de un estupendo y moderno campo de hierba sintética, la felicidad no es completa, ya que le han dejado la instalación a «medio hacer». A la empresa María García Martínez, encargada de la obra de construcción del pabellón que contiene los vestuarios y el graderío del campo de fútbol, le anularon el contrato por no cumplir con los plazos. Y, por tanto, allí lo único que se puede hacer es jugar. Nadie puede sentarse en la grada. No hay vestuarios. Y no se pueden utilizar los bajos contiguos al terreno de juego. En la concejalía alegan ahora que todo se debe a un error en la cimentación del graderío, dado que el subsuelo no tiene la firmeza necesaria. Y ahora hay que reforzarlo.

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