La Verdad
FC Cartagena

Paco Gómez saluda al presidente de la Balona en presencia del vicealcalde JOsé Cabezos, en febrero del año pasado. / ANTONIO GIL

El CSD descubre que Paco Gómez no era el dueño del FC Cartagena

  • El 'ok' de Madrid a Javier Martínez se ha frenado tras comprobarse que el empresario de Jacarilla había traspasado las acciones a un empleado suyo sin avisar a nadie

Han pasado ya siete semanas desde que la empresa Sporto Gol Man entró en el FC Cartagena y comenzó, por tanto, el proceso en el cuál el Consejo Superior de Deportes (CSD) debe terminar dando por buena la compraventa del 100% de las acciones de la SAD albinegra, firmada en una notaría de Murcia el pasado 10 de marzo. La firma de la parte compradora fue la del abogado valenciano Javier Martínez y la firma de la parte vendedora fue la de Paco Gómez, dueño del club desde 2003 hasta esa tarde del pasado 10 de marzo. Todo está en regla, el club ha ido aportando la documentación que se ha solicitado desde Madrid y el 'ok' del CSD debería haber llegado ya. En condiciones normales, habría llegado ya.

Entonces, ¿a qué se debe este retraso? ¿Por qué el FC Cartagena todavía no es propiedad de Javier Martínez y de sus anónimos inversores de Sporto Gol Man? ¿Por qué dura tanto este periodo de interinidad? La explicación es tan insólita como sencilla. Según ha podido saber este periódico, resulta que el CSD ha descubierto que Paco Gómez no era el dueño del FC Cartagena hasta el pasado 10 de marzo. Para todo el mundo, el constructor y bodeguero de Jacarilla era el dueño y único accionista del FC Cartagena SAD hasta que le vendió el club a Javier Martínez. Pero no era así.

Bastantes meses antes, Paco Gómez le traspasó todas sus acciones en el FC Cartagena SAD a Félix Lozano, un trabajador suyo que ha hecho de todo en el Grupo Invercón, la compañía que Gómez fundó a principios de los años 90. En una operación privada, sin contar con nadie y de forma secreta, Gómez le endosó todo el paquete accionarial a un fiel empleado suyo de muchos años. En el verano de 2010, Gómez había suscrito el 100% de las acciones (7,7 millones de euros) y esa es la única información que tenía en su poder el CSD hasta hace unos días.

Movimiento desconocido

Lo que no sabían en Madrid -ni en ningún sitio- es que tras la conversión del antiguo club deportivo en Sociedad Anónima Deportiva (SAD), y pasado un tiempo prudencial, Paco Gómez había ordenado a sus abogados la creación de una nueva sociedad mercantil, cuyo único miembro y administrador es el alicantino Félix Lozano, quien también es el administrador único de Bahía de Guardamar SL (empresa dedicada a la promoción inmboliaria) y Ornamentales del Mediterráneo SL (dedicada al comercio al por mayor de flores y plantas), otras dos empresas propiedad de Paco Gómez. En el caso que nos ocupa, Gómez le entregó todas las acciones que tenía en el FC Cartagena a esta sociedad puesta a nombre de Lozano. Y no informó de este cambio de propiedad al CSD.

Así, en las últimas semanas, los técnicos del CSD han frenado todo el proceso de adquisición del club por parte de Sporto Gol Man, al darse cuenta de que la firma de Paco Gómez carecía de valor en esta operación, ya que en contra de lo que ellos pensaban el dueño del Cartagena no era él. Así, representantes del club y de la propia Sporto Gol Man tuvieron que dar explicaciones en Madrid recientemente y, además, se ha retardado mucho el 'papeleo'. Ahora, tras conseguir la firma de Félix Lozano y aclararse realmente el tema de la titularidad de las acciones, lo normal es que todo se acelere y que el CSD dé su 'ok' a Sporto Gol Man más pronto que tarde.

En este sentido, fuentes del CSD indicaron a 'La Verdad' que el «cotejo de datos y la toma de decisiones en procesos similares al que está viviendo ahora mismo el Cartagena puede irse hasta los seis meses, aunque lo normal es que se haga antes y que los informes definitivos se cierren antes del plazo límite. Nunca se llega a los seis meses y lo que se intenta es agilizarlo todo. El problema está en que muchas veces, la información que nos llega no es del todo correcta [como ha pasado en el caso del Cartagena] o se nos manda tarde». En el caso más reciente, el del Cádiz, el CSD tardó diez semanas en emitir su veredicto. En el Cartagena estamos a punto de entrar en la octava semana del proceso.

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