El Efesé se acomoda en la cima

Era necesario no sentir el vértigo del liderato, conquistado el domingo anterior en el Cartagonova tras una victoria de puro trámite ante el Sanluqueño y, sobre todo, por los continuos fallos del Marbella, en su campo y fuera de él. Pero, en cualquier caso, el Efesé ya era primero. Y lo que tocaba ayer era no repetir el mal partido de hace dos semanas en Jaén. Había que cambiar de cara a domicilio, por los puntos que se ponían en juego en el Francisco de la Hera y por mandar también un mensaje nítido (de solidez y grandeza) al resto de los equipos que aspiran a ser campeones de este grupo IV.

El Lorca, pese a su empate de ayer en Huelva, sigue apretando. Y el Mérida, definitivamente resucitado por el técnico Eloy Jiménez -otro manchego que como Alberto Monteagudo maneja como pocos los códigos de la Segunda B-, viene por detrás a toda mecha. Por tanto, nada mejor que ofrecer una versión de equipo grande en un partido a domicilio y que además pudo ver todo el que quiso por televisión. Avisó Monteagudo en la previa. «Si este equipo se empeña en no perder el liderato, no lo pierde», soltó.

El mensaje fue de consumo interno, por supuesto. A los suyos, los Sergio García, Cristo, Juanlu Hens, Moisés, Rivero y compañía les dijeron con su exhibición de ayer en Almendralejo que no hay que tener miedo a las alturas y que este domingo ante el Villanovense será buena cosa que en las gradas del Cartagonova se vean más butacas ocupadas que vacías. Ganar al quinto clasificado significará abrir un colchón de ocho puntos con respecto a la zona de los que no jugarán el 'playoff'. Palabras mayores a un mes del parón navideño.

Solidez y buen juego

Pero también hubo un mensaje externo. A los equipos que vienen por detrás y aspiran a superar en la tabla al Efesé, los Óscar Ramírez, Jesús Álvaro, Gonzalo Verdú, Sergio Jiménez y compañía les dejaron claro con su rendimiento de ayer sobre la embarrada hierba del Francisco de la Hera que han decidido poner la velocidad de crucero y que no van a esperar a nadie. Si a los constantes triunfos en el Cartagonova se le suman actuaciones como la de ayer en tierras pacenses, mucho van a tener que correr Lorca, Mérida, Marbella, Jumilla y Real Murcia para dar caza en las próximas semanas al Efesé.

Solo en los primeros cinco minutos creó algo de peligro el conjunto local, sobre todo con un derechazo de Dieguito que tocó en Moisés y pudo despistar a Limones. El balón salió fuera. Otro trallazo a la salida de un córner que se fue rozando el palo, en esta ocasión del activo Sergio García, en el minuto 6, fue el inicio de una ofensiva brutal del cuadro cartagenero. Solo dos minutos más tarde, Saavedra hizo un paradón para evitar el tanto de un desatado Jesús Álvaro. Fue tras una preciosa triangulación con Cristo y Juanlu Hens, quien cuatro partidos después regresó al equipo, quedándose Chus Hevia en el banquillo.

Luego fue Arturo quien estuvo a punto de marcar, después de un fantástico servicio desde la derecha de Sergio García. Y tras otra incursión del zamorano, que hizo lo que quiso con el entregado Sergio Rodríguez, llegó el 0-1, anotado por Rivero, quien aprovechó un rechace del portero local a un tiro anterior de Cristo. En la jugada aparecieron cinco futbolistas visitantes dentro del área local. Así, como si tuvieran un imán, la pelota cayó primero en las botas de Cristo. Y luego en las del goleador Rivero. La solidez atrás y el buen juego ofensivo tenían recompensa bastante pronto.

Perdona el segundo

Ni la lesión de Arturo, que dejó su sitio a Fernando en el minuto 22, paró las ansias de los visitantes, muy superiores en todo momento a un Extremadura que se conformó con llegar vivo al descanso. Porque Cristo, después de un servicio a lo Michael Laudrup de un destacadísimo Gonzalo Verdú, y Juanlu Hens, tras otra asistencia desde la banda de Gonzalo Verdú (en esa ocasión imitando al mejor David Beckham), pudieron hacer el segundo antes del intermedio.

Volvió a tener cinco minutos buenos el Extremadura en la reanudación, con dos estupendos disparos de Willy y Pierre. Pero Limones respondió perfectamente. Con el paso de los minutos, el Efesé se fue haciendo con el control de la situación de nuevo y sentenció el encuentro en un perfecto contragolpe. Marcó Sergio García tras robarle la cartera Sergio Jiménez a Fall en el centro del campo. Fernando lanzó la contra y Sergio García, desquitándose del mano a mano con Rivas en Nueva Condomina, en esta ocasión no falló. El 0-2, a falta de un cuarto de hora, dejó todo muy claro en una mañana en la que el Cartagena demostró por qué es el líder.