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Mariano Sánchez se anticipa a Iván Alonso, en agosto de 2008. :: p. s.
Las tortas de Iván Alonso y la camiseta de Kiko Ratón

Las tortas de Iván Alonso y la camiseta de Kiko Ratón

FRANCISCO J. MOYA

Martes, 28 de julio 2015, 22:56

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Durante muchos años el Cartagena-Murcia fue un auténtico clásico del verano. Siempre se jugaba aquí, en El Almarjal o en el Cartagonova. A menudo era el partido de presentación del Efesé, que coincidía con el trofeo Carabela de Plata. Siempre fueron amistosos con poca amistad, polémicos y con alta tensión competitiva. De hecho, el Murcia tiene cuatro 'carabelas' en su sala de trofeos, las de 1981, 1988, 1994 y 2004. En los últimos tiempos, el derbi de agosto se fue perdiendo. El club grana dejó de venir. El Cartagena empezó a invitar a otros.

Pero hubo algunas excepciones. El nacimiento de la televisión autonómica trajo la creación de un trofeo veraniego al que los dos grandes de la Región no pudieron decir que no. El 10 de agosto de 2008, cuatro mil espectadores dedicaban una sonora pitada al Murcia de Javier Clemente nada más pisar el césped del Cartagonova. Pronto se vio que aquello de amistoso iba a tener muy poco.

La tensión se respiraba en la grada, los cánticos entre una y otra afición eran constantes y una entrada fuera de lugar de Kabous a Pepe Mena en el segundo minuto de partido y la posterior tangana que se produjo al instante en el centro del campo, certificaban que habría lío. En un 'bolo' tenso', albinegros y granas empataron a uno. Fue el mismo resultado de 2005, en un trofeo que se llamó de La Amistad (solo se jugó ese verano) y que también tuvo como escenario el recinto de Benipila. Aquella noche, el árbitro Gómez Liarte tuvo que sacar tarjetas amarillas a Leo, Merino, Marco, Juanma, Iván Alonso, Corona, Héctor, Marañón y Garro.

En uno de estos trofeos amistosos jugados en el Cartagonova, un triangular con Murcia, Lorca y San Ginés disputado en diciembre de 2005 para rendir tributo al meta internacional Juanmi, el uruguayo Iván Alonso montó un lío tremendo al propinar un puñetazo a Álvaro Jurado, entonces jugador del Lorca. Además, fue expulsado el meta Olave y las relaciones entre lorquinos y granas estuvieron un tiempo rotas.

También hubo jaleo la última vez que Efesé y Mucia se vieron las caras en un partido veraniego. Fue en un tres en uno -también participó el Lorca Atlético- celebrado en el Artés Carrasco, en 2011. El árbitro lorquino José María Sánchez, quien curiosamente acaba de subir a Primera, expulsó en un partido que solo duró 45 minutos a dos defensas del Cartagena, Mariano Sánchez y Josemi, algo que hizo estallar de indignación en el palco al entonces dueño del Cartagena, Paco Gómez.

El amistoso no necesitó calentamiento. Durante el Lorca-Murcia, el meta Alberto Cifuentes había mandado callar a la afición cartagenerista del fondo sur cuando ésta le mostró una camiseta de Kiko Ratón, delantero entonces del Girona, recordándole el fatídico penalti que llevó al equipo grana a Segunda B un par de meses antes. A los dos minutos, Paco Sutil se revolvió tras una fea entrada de Dimas, que vio amarilla. Aquello no fue un amistoso.

Ganó el Murcia por 1-0. Y Chando, autor del tanto, celebró el gol junto a sus compañeros como si se tratara de un partido de Liga de los importantes. Es lo que tienen los derbis. Un Murcia-Cartagena en verano y sin nada en juego sigue siendo un Murcia-Cartagena. Esto es: un partido especial. En diez días lo comprobaremos de nuevo en Pinatar Arena.

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