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Aficionados de tribuna estallan contra el banquillo, tras la eliminación copera ante el UCAM, a principios de septiembre.
Un año negro, de la A a la Z

Un año negro, de la A a la Z

Un proceso de compraventa algo turbio y el 'no ascenso' ante el Avilés fueron el preludio de un final tormentoso. Sofinvest pagó e impuso a Ribas. El uruguayo, obligado por los malos resultados, ha tenido que dejar paso a Palomeque

Francisco J. Moya

Domingo, 28 de diciembre 2014, 22:44

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El año 2014 arrancó con el subidón del mes anterior, un diciembre de 2013 marcado por aquel inolvidable enfrentamiento copero ante el Barça. En enero, tras las victorias ante El Palo y el Lucena, el Cartagena se puso a un solo punto del liderato. Pero nunca llegó a alcanzarlo. Jugó el 'playoff', pero no ascendió. Y hoy, a dos días de que termine este negro 2014, el Efesé está mucho más cerca de la zona de descenso a Tercera que de la de ascenso a Segunda A. En lo económico, la quiebra es total. Y en lo institucional, la histórica compraventa llevada a cabo en marzo no ha solucionado nada. Nos espera un incierto invierno albinegro. En 2015, desde luego, puede pasar de todo. De momento, repasemos qué ha sucedido en este 2014 que ya se nos va.

A de Albacete. Vino a finales de enero al Cartagonova y destrozó al equipo de Luis Tevenet (0-2), que la semana anterior ya había sufrido un revolcón durísimo en Lorca (3-0). En un partido claramente dominado por los manchegos (apoyados por 1.300 seguidores en su desplazamiento a Cartagena), la hinchada albinegra abrió los ojos y despertó de su sueño. Esa tarde se vio que el Albacete iba camino de Segunda A, y que el Cartagena, sin refuerzos, lo iba a tener muy crudo para subir en junio. Y no subió.

B de Barcelona. Fran de Paula y Cristina Bustillo cometieron un grave error al asegurarles a los futbolistas de la plantilla 13-14 que con los más de 600.000 euros que dejó la eliminatoria de Copa del Rey ante el Barça todo estaba arreglado. Paco Gómez, dueño del club hasta marzo, se quedó con la mitad del dinero para tapar otros agujeros. Y los impagos fueron una constante durante toda la campaña.

C de Cáceres. Domingo 'El Bomba' Cáceres ha sido la cara del cuerpo técnico del Cartagena entre agosto y diciembre. El escudero más fiel de Julio Ribas, su segundo desde hace 20 años, se ha llevado los reproches y abucheos de los aficionados cartageneros en varias ocasiones. El uruguayo, que fracasó en sus aventuras como primer entrenador del Sudamérica y del Sportivo Las Heras de Concordia, ha llevado el peso de los entrenamientos desde que Ribas tuvo que dejar de pisar el césped.

D de Daniel Golpe. El uruguayo es la mano derecha de Sergio Sofia, inversor italiano que en verano puso unos 200.000 euros para saldar deudas con la AFE. Golpe, íntimo amigo de Julio Ribas desde que en los años 80 ambos jugaron juntos en Nacional de Montevideo, es una persona clave en este proyecto del Cartagena. Es un tipo discreto, que huye de los focos. Pero su conocimiento del mercado y sus muchos contactos en el mundillo del fútbol hacen que su voz sea escuchada y respetada por Javier Martínez, Javier Marco y Florentino Manzano.

E de entrenador. Julio Ribas fue contratado por Manzano porque traía 200.000 euros debajo del brazo. No pudo sentarse en el banquillo porque su título no sirve para la Segunda B española. No obstante, mandó desde la grada y las cosas no han funcionado. En las 18 primeras jornadas de este año, el Cartagena ha sumado 13 puntos menos que la temporada pasada con Luis Tevenet, ahora líder del grupo II con el Huesca. Y Pacheta es líder del grupo III con el Hércules. Y Pedro Reverte, director deportivo del UCAM, es líder del grupo IV. Todos los ex triunfan.

F de Florentino Manzano. Él es el 'autor intelectual' del proceso de compraventa que empezó en diciembre y acabó en marzo. Cristina Bustillo le llamó pidiendo auxilio y él, que tenía los días contados en Cádiz, supo tocar todas las teclas para que Paco Gómez fuera desalojado y él volviera tener poder y gran parte del control en el club que fundó en 1995. De momento, como ya le sucedió en anteriores etapas, las cosas no están funcionando como él deseaba.

G de Gato. Fue el primer fichaje del Cartagena 14-15. Llegó del Lucena con la etiqueta de revulsivo y de jugador de segundas partes, pero lo cierto es que ha sido uno de los más destacados en esta pésima primera vuelta. Suma cuatro goles, se ha consolidado en el 'once' titular y durante muchos partidos se ha convertido en el único peligro ofensivo del equipo de Ribas. Sus compañeros le buscan siempre. Es una bala.

H de Hacienda. La deuda del Cartagena con el fisco, que era de 3,1 millones a principios de año, se acerca ya a los 3,5 millones, debido a los intereses. Es el principal problema de un club que, por lo demás, no tiene débitos demasiado alarmantes. Si se aprueba el concurso de acreedores (se pedirá formalmente mañana y a finales de febrero se sabrá si el Juzgado de lo Mercantil de Murcia lo acepta o no), la viabilidad económica del Efesé dejará de preocupar, al menos a corto plazo.

I de indignación. La grada del Cartagonova anda muy molesta con lo que está sucediendo en esta temporada 2014-15. La afluencia de público al estadio se ha desplomado (menos de tres mil en los últimos partidos del año) y las pañoladas, broncas y abucheos han sido una constante desde septiembre, con la eliminación copera ante el UCAM, hasta diciembre, con el batacazo liguero frente al Cádiz.

J de Javier Marco. El joven abogado valenciano, de 28 años, es la cara de Sporto Gol Man 2020. Su cargo es el de presidente, aunque sus atribuciones reales son las de gerente, asesor jurídico e impulsor de acuerdos con empresas y patrocinadores privados. Hace lo que puede.

K de kilómetros. Cuanto más lejos de casa juega este Cartagena, mejor le van las cosas. A más de 700 kilómetros de aquí, en Cáceres y Arroyo, cosechó el Efesé dos de sus tres victorias. En Villanueva de la Serena, también en Extremadura, rozó otro triunfo. Sin embargo, en Asturias (en la vuelta del 'playoff' ante el Avilés), el equipo albinegro vivió la decepción del año.

L de Limones. El portero de Daimiel es un valor seguro. Junto a Tarantino y Sergio Jiménez, es el único que empezó y acaba el año en el vestuario del Efesé. Notable hasta verano y solo aprobado en estos últimos meses. Empezó muy mal, pero en las últimas semanas hemos vuelto a ver su mejor versión bajo palos.

M de Martínez. El abogado valenciano, de 49 años, fue la persona que firmó junto a Paco Gómez la compraventa del club. Lo hicieron ante un notario de Murcia el 10 de marzo. «Los negocios se hacen. No se cuentan». Eso dijo Martínez en su primera aparición por Cartagena. Luego se supo que Florentino Manzano estaba a su lado. Su proyecto genera muchas dudas.

N de novedades. El primer cambio -muy esperado- ha sido la llegada de Manolo Palomeque al banquillo. Simón Ruiz pasa a ser el delegado del equipo. Habrá más novedades. Ni siquiera está asegurada la continuidad de Julio Ribas como mánager general. Sofinvest, la empresa que él y Golpe trajeron hasta Cartagena, se está planteando abandonar el proyecto de forma definitiva.

O de Ortega. El concejal de Deportes, Diego Ortega, vive absolutamente apartado de la realidad albinegra y no quiere saber nada del día a día. Lo sigue a través de los medios de comunicación. No le convence el proyecto de Sporto Gol Man.

P de Pinatar Arena. Allí andan Fran De Paula, presidente hasta marzo; y Mariano Sánchez, capitán hasta junio. Por el complejo pinatarense, la segunda casa del Efesé hasta junio, no aparece el Cartagena desde agosto, cuando jugó su cuarto y último 'bolo' de pretemporada en ese recinto. En esta campaña 14-15, los entrenamientos se dividen entre La Manga Club y el campo de la Urbanización Mediterráneo.

Q de Quique Pina. Su nombre sigue ahí. Y él siempre se deja querer. Sus principales colaboradores, Juan Carlos, Pedro y Jorge Cordero, son cartageneros. Pina no tiene ninguna intención de dirigir el Efesé, pero está cantado que la familia Cordero entrará tarde o temprano en el club cartagenero. Pedro, especialmente desde el 'no' de Paco Gómez en junio de 2013, es el que más ilusionado está con esa idea.

R de Ribas. Sebastián, el hijo de Julio, vino con la vitola de excelente delantero. En la Segunda francesa fue máximo goleador en 2011. Su fichaje, cocinado durante todo el verano, se concretó el último día de agosto. El ariete uruguayo tiene calidad y sabe rematar. Pero ha terminado el año con solo cuatro goles y se ha visto afectado por el nefasto rendimiento del colectivo. Un sector de la grada la ha tomado con él y ha sido muy castigado por la hinchada albinegra en los últimos partidos del año.

S de Sporto, de Sofinvest y de Shamsir. Bucear en las profundidades del proyecto de Javier Martínez, Javier Marco y Florentino Manzano en el actual FC Cartagena es adentrarse en una enrevesada maraña empresarial de tamaño desconocido. En ella, es complicado averiguar quién maneja el barco y de dónde viene el dinero. Todo está algo difuso. Hasta el momento, Sofinvest es la que más dinero ha aportado al club. Pero no tiene acciones de la SAD.

T de tienda. El club cerró el local que tenía en la calle del Carmen y abrió a principios de diciembre una nueva tienda oficial, en Espacio Mediterráneo. El cambio es acertado, ya que la nueva tienda le sale gratis al club, está mejor situada e incorpora un plató de televisión y radio para entrevistas y eventos.

U de Uribe. El técnico del Avilés le ganó la partida a Tevenet en la eliminatoria por el ascenso (5-1 en total) e impidió que el sueño albinegro se alargara en el tiempo. A Uribe, un notable entrenador de Segunda B, le sobraron sus ridículas declaraciones de los días previos al partido de Cartagena.

V de Valencia. De allí vienen Javier Martínez y Javier Marco, las dos personas que intentan sacar del pozo al Cartagena. Ambos están preparando la entrada del club en concurso de acreedores, la tabla a la que intenta agarrarse el Efesé para esquivar la bancarrota definitiva. En lo deportivo, son los uruguayos Ribas y Golpe, siempre asesorados por Manzano, los que toman las decisiones de calado.

W de web. La página oficial del Cartagena ha mejorado bastante con respecto a pasadas temporadas. Tiene más contenidos y se actualiza a diario. También ha aumentado la presencia del club en redes sociales y la mejora en cartelería es muy evidente.

X de equis. El rey del empate. En eso se ha convertido este Cartagena 14-15. Con 12 igualadas, es junto al modestísimo CD El Palo, el equipo con más empates de todo el fútbol español. Siete de esos empates se han dado en el Cartagonova.

Y de Yepes. El preparador de porteros, con su negativa a ejercer de portavoz del cuerpo técnico en la previa de la salida a Lucena, escenificó el caos que se vivía entonces en el club. Julio Ribas, entre su marcha a Uruguay y la sanción del Comité de Competición, optó por no hablar. Simón Ruiz se cansó de dar la cara y llevarse todas las críticas. Yepes no quiso seguir su camino. Y, al final, fue el preparador físico Miguel Cuesta el que se encargó de explicar lo inexplicable en una sala de prensa que (igual que las gradas) se fue vaciando poco a poco. En este sentido, la llegada de Manolo Palomeque también ha sido un bálsamo para todos.

Z de zozobra. Nadie sabe qué futuro le espera a un club que en junio cumplirá 20 años de vida. Adivinar qué sucederá dentro de seis meses es imposible. Fundamentalmente, porque nadie sabe qué va a pasar en la entidad albinegra dentro de una semana, ni siquiera los que mandan en ella. El 'ok' del juez al concurso de acreedores, que debería llegar en febrero, supondría un soplo de brisa para un club que Paco Gómez dejó en avanzado estado de descomposición. El drama sería que sus actuales rectores, Martínez, Marco y Manzano, hicieran 'internacional' al constructor y bodeguero de la Vega Baja.

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